Identifican presunto delincuente abatido en residencial Buenaventuranzas
Yosper, Santo Domingo.- En una situación desesperada, el presunto delincuente que resultó muerto en un tiroteo con la Policía Nacional el miércoles por la tarde, hizo una llamada de auxilio al canal de televisión Antena 7, mientras se encontraba en el residencial Las Bienaventuranzas, en Santo Domingo Norte, expresando temor por su vida y solicitando ayuda antes de su fatal desenlace.
El individuo, cuya identidad no ha sido revelada, realizó una videollamada desde un baño y clamó: "Por favor, me van a matar, tan aquí adentro, por favor (...), venga, mi papá, le voy a mandar la ubicación". Tristemente, poco después de esta llamada desesperada, la conexión se perdió y una fotografía muestra su cuerpo sin vida en medio de un charco de sangre.
La Policía Nacional informó que el hombre resultó abatido durante un supuesto intercambio de disparos con agentes policiales, después de haber herido a dos de ellos, uno perteneciente a la Unidad Sawt y otro de la Dirección de Investigaciones Criminales (Dicrim) de la PN.
Diego Pesqueira, portavoz de la institución, señaló que tanto la madre como la esposa del hombre fueron detenidas. Aunque no se proporcionó su nombre, la Policía lo describió como un "reconocido delincuente" buscado por la muerte de cuatro personas y heridas a otras ocho o diez.
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A pesar de la versión policial sobre el historial delictivo del hombre, algunos residentes del residencial Las Bienaventuranzas manifestaron no estar al tanto de sus supuestos antecedentes criminales. El proyecto de condominio, ubicado en la zona de la avenida Jacobo Matluta en Santo Domingo Norte, generalmente se considera tranquilo y seguro.
Gabriel Cabrera, residente del lugar durante dos años, señaló que esta fue la primera vez que experimentó una situación de tal magnitud en la zona. La mayoría de los residentes no sabían que en su comunidad vivía un individuo con el supuesto historial delictivo atribuido por la Policía. La seguridad del complejo residencial requiere permisos para el acceso y cuenta con barreras de seguridad.
Jesús Gutiérrez, encargado de seguridad del residencial, relató que escuchó una gran cantidad de disparos y vio cómo trasladaban a uno de los policías heridos. Como medida de precaución, al igual que otros residentes, se resguardó para evitar ser alcanzado por las balas.
