En un desarrollo reciente del caso de feminicidio que ha conmocionado a la comunidad de Guachupita, Gabriel Contreras Parra se entregó a la Policía Nacional, confesando haber estrangulado a su expareja, Esther Sosa Chacón. Contreras Parra, quien había permanecido prófugo desde el crimen, será presentado ante la justicia en las próximas horas.
Miguelina, hermana de la víctima, había descrito anteriormente la relación entre Esther y Contreras Parra como “tóxica”. Según Miguelina, “de regalo de madre o de cumpleaños, lo único que él sabía regalar eran golpes”, destacando el patrón de abuso que caracterizaba la relación.
Esther Sosa Chacón era conocida por su carácter trabajador y tranquilo. A pesar de su separación, la pareja solía reconciliarse temporalmente. Miguelina también reveló que Gabriel Contreras Parra tenía antecedentes de maltrato hacia otras mujeres, y que tanto ella como Esther habían solicitado órdenes de alejamiento contra él.
Las circunstancias exactas del incidente aún no se han esclarecido completamente. Las autoridades continúan investigando para obtener detalles completos de este trágico suceso que ha sacudido profundamente a la comunidad.