El Juzgado de Instrucción del distrito judicial de María Trinidad Sánchez dictó tres meses de prisión preventiva contra Tony Jiménez Faña, acusado del asesinato de Elianny Inorelis de la Cruz, una joven de 19 años de la comunidad de Bella Vista, en Nagua. La decisión se tomó tras considerar la gravedad de los hechos y la posible peligrosidad del acusado.
La relación entre la víctima y el acusado había finalizado hace más de seis meses, pero, según informes, Jiménez Faña continuaba acosándola y persiguiéndola. El crimen ocurrió después de varios intentos fallidos de la joven por liberarse de la persecución constante. La situación llegó a su punto más trágico cuando, de acuerdo con el testimonio de los familiares, el agresor habría incendiado intencionalmente la habitación de Elianny para obligarla a salir.
Al intentar escapar, Elianny fue interceptada por Jiménez Faña, quien, en un ataque brutal, le propinó 101 puñaladas y la asfixió, dejándola sin vida en la escena. La comunidad ha quedado conmocionada por la violencia del acto, que ha sido calificado como un crimen de extrema crueldad por parte de las autoridades locales.
Los familiares de la joven, entre ellos Mireya Pérez García y Sonia Victoria, han descrito el crimen como un asesinato doblemente cruel, señalando que Jiménez Faña no solo privó a Elianny de la vida, sino que lo hizo de manera deliberada y tortuosa. Además, han exigido que se aplique la pena máxima contemplada en el sistema judicial, subrayando que este asesinato no solo afecta a su familia, sino a toda la comunidad de Bella Vista.
Las denuncias por acoso contra el acusado no son nuevas. La familia de Elianny había alertado en repetidas ocasiones sobre el comportamiento posesivo y violento de Jiménez Faña, quien se negaba a aceptar la ruptura y la posibilidad de que ella pudiera rehacer su vida. Las autoridades han confirmado que estas denuncias previas están siendo investigadas como parte de un patrón de violencia que culminó en el asesinato.
La indignación por el asesinato no se ha limitado a las expresiones de dolor y exigencias de justicia de los familiares. La noche del miércoles, la casa de Tony Jiménez Faña en la comunidad de Bella Vista fue incendiada por desconocidos. Testigos afirman que la vivienda fue rociada con gasolina y que el fuego la consumió por completo, dejando el inmueble destruido. Aunque no se ha identificado a los responsables, el acto ha sido interpretado como un reflejo del enojo y la impotencia de los vecinos ante un crimen que consideran atroz e inaceptable.