Yosper, Nueva York – El productor y empresario musical Sean “Diddy” Combs se encuentra en prisión, enfrentando acusaciones graves relacionadas con presuntas actividades ilícitas en las que estaría involucrado. Combs fue detenido el 16 de septiembre, y desde entonces, se han revelado detalles sobre su supuesta participación en fiestas conocidas como «Freak Offs», donde, según informes, obligaba a mujeres a realizar actos no consentidos.
Durante operativos realizados en marzo en propiedades del artista en Los Ángeles y Miami, agentes federales incautaron más de mil botellas de aceite para bebé y lubricantes. Estos productos, presuntamente, habrían sido usados junto con la dr0ga GHB, una sustancia con efectos sedantes que, según la fiscalía, era aplicada a las víctimas.
El abogado defensor de Combs, Marc Agnifilo, ha negado las acusaciones, minimizando la relevancia de la cantidad de botellas incautadas, argumentando que podrían haber sido adquiridas para uso personal debido al tamaño de las residencias de Combs.
Además, nuevas denuncias han surgido. Tony Buzbee, abogado de un hombre identificado como John Doe, declaró que su cliente fue presionado y agredido por Combs en 1998 cuando tenía 16 años. De manera similar, la abogada Ariel Mitchell-Kidd representa a una mujer que también afirma haber sido inmovilizada y atacada por el artista.
El caso continúa en los tribunales, mientras se espera que las autoridades presenten más pruebas en las próximas audiencias.