YOSPER, LA ROMANA.- El Tribunal Colegiado del Departamento de Justicia en La Romana emitió anoche una condena de 30 años de prisión para tres individuos a quienes el Ministerio Público imputó el homicidio a tiros del abogado y pastor Santo Cedeño del Rosario, debido a una confusión con otro colega del ámbito legal. Este trágico incidente tuvo lugar la tarde del 17 de octubre de 2018.
Los condenados en este caso son Felipe Valerio, Carlos Alfredo Rosario de Jesús (conocido como Supite o Pipe) y Nathanael de Jesús Severino (Naty). Felipe Valerio cumplirá su sentencia en la prisión pública de El Seibo, mientras que Carlos Alfredo Rosario de Jesús y Nathanael de Jesús Severino la cumplirán en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) Cucama, en La Romana.
El fallecimiento de Cedeño se produjo mientras recibía atención médica en un centro de salud de la provincia de La Romana, al que fue llevado tras sufrir los disparos mortales.
Según el expediente acusatorio, el incidente ocurrió cuando la víctima se encontraba en su vehículo, un Mitsubishi de color blanco, esperando a uno de sus hijos que asistía al colegio Arca de Cristo, en la calle Teófilo Ferry, en el centro de la ciudad.
Felipe Valerio fue el responsable de la muerte de Cedeño del Rosario, ya que le disparó en múltiples ocasiones. Por su parte, Nathanael de Jesús Severino conducía la motocicleta en la que se desplazaban al momento de cometer el horrendo crimen.
Las investigaciones revelaron que Carlos Alfredo Rosario de Jesús fue el individuo que ubicó, orientó y trazó la ruta y lugar donde se encontraba el líder religioso.
En relación con este caso, también se procesó a Félix Antonio Martínez Valdez (conocido como Liquito), quien, de acuerdo con la acusación, fue la persona que, a solicitud de individuos no identificados, contactó a los acusados y les ofreció RD$200,000 para asesinar al abogado Julin Cabrera. Para ello, les entregó una foto de Cabrera.
Se estableció que, al contactar a Carlos Alfredo Rosario de Jesús, este comenzó un proceso de ubicación de Julin Cabrera y, por error, localizó al abogado y pastor Santo Cedeño del Rosario, a quien le quitaron la vida pensando que estaban cumpliendo la orden de eliminar al abogado Julin Cabrera.
Los familiares de la víctima expresaron su satisfacción con la sentencia del tribunal, aunque reconocieron que esta no devolverá a su ser querido, a quien describieron como una persona buena y colaboradora con todos.