Jurickson Profar expresa su enamoramiento por la Liga de Béisbol Domincana
YOSPER, SANTO DOMINGO.- El jugador curazoleño Jurickson Profar, quien debutó en la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (Lidom) hace 12 temporadas (2012-13) con los Tigres del Licey, cuando era considerado el prospecto más destacado de los Vigilantes de Texas, ha decidido regresar a esta liga después de una década. Su retorno se produce motivado por su pasión por el béisbol, su deseo de competir a un alto nivel y su estrecho vínculo con la cultura dominicana. Ahora, el experimentado jugador defiende los colores de las Estrellas Orientales.
Profar, quien cuenta con una amplia experiencia desde su última participación en la Lidom en la temporada 2013-14, se mostró emocionado por su regreso a la liga. En su última temporada con el Licey, exhibió un rendimiento destacado con una línea ofensiva de .284/.435/.398. Durante ese período, conectó 25 hits, incluyendo un jonrón, recibió 24 bases por bolas, anotó en 20 ocasiones y logró seis robos en 25 juegos.
Su incorporación a las Estrellas no es casualidad, ya que existe una sólida amistad que lo une a la familia Tatis. En los últimos dos años, antes del inicio de la temporada de Grandes Ligas, Profar ha entrenado en la República Dominicana junto a Fernando Tatis padre, y considera a Fernando Tatis Jr. como un "hermanito".
Jurickson Profar siempre mantuvo el deseo de volver a jugar en la pelota dominicana, y este año se le presentó la oportunidad de hacerlo. Con 10 años de experiencia en las Grandes Ligas y habiendo jugado recientemente para los Padres de San Diego, el versátil jugador expresó su amor por la Lidom, resaltando la importancia de jugar béisbol de invierno, especialmente en la República Dominicana, donde reconoce el impresionante talento de los jugadores que participan en esta liga.
"Esta liga me encanta", enfatizó Profar, destacando que competir con jugadores de alto calibre en la Lidom contribuye a su desarrollo como jugador. Además de su pasión por el béisbol dominicano, Profar reveló su amor por la comida criolla, añadiendo un toque personal a su conexión con la cultura del país.