La reacción de la esposa de Neymar tras video con dos chicas en una disco

Yosper, Brasil: Neymar, el futbolista brasileño que recientemente firmó un millonario contrato con un club en Arabia Saudita, se encuentra en medio de una nueva controversia después de asistir a una fiesta en Barcelona antes de su regreso al país árabe tras participar en partidos de la fecha FIFA. Este incidente ha generado tensiones en su relación con Bruna Biancardi, con quien espera su segundo hijo, que está programado para nacer en un mes.

El periodista brasileño Leo Dias compartió un video en sus redes sociales que muestra al futbolista brasileño disfrutando de una noche de diversión en una discoteca de Barcelona, acompañado por dos mujeres.

El video se volvió viral y provocó la reacción de Bruna Biancardi, quien expresó su decepción en su cuenta de Instagram con un mensaje contundente: "Buenas tardes. Soy consciente de lo que pasó y nuevamente estoy decepcionada. Pero en la recta final de mi embarazo, mi enfoque y preocupación se dirigen exclusivamente a mi hija, y eso es todo en lo que voy a pensar por el momento. Gracias por los amables mensajes".

A pesar de que se creía que Neymar y Bruna Biancardi estaban separados, hace algunas semanas se les vio juntos en la llegada del futbolista a Arabia Saudita, lo que llevó a la especulación sobre una posible reconciliación. Sin embargo, ahora cada uno se encuentra en diferentes partes del mundo.

Bruna ha decidido regresar a su Brasil natal, posiblemente para estar cerca de su círculo cercano cuando la pequeña Mavi (nombre de la futura bebé) nazca, mientras Neymar se ha incorporado a su nuevo equipo, Al Hilal.

Cabe recordar que hace unos meses se reveló que Neymar y Bruna Biancardi mantienen una relación abierta, con ciertas condiciones que permiten la posibilidad de ser infiel bajo circunstancias específicas. A pesar de los constantes rumores de infidelidad que rodean al futbolista, la pareja ha optado por darse una nueva oportunidad y acordado ciertas pautas, como la discreción y la restricción de gestos afectuosos con terceras personas.